T-Solar ha incorporado dos nuevos equipos a la planta de Orense, que alcanzará los 190 empleados y que, desde junio, trabaja de forma ininterrumpida y a pleno rendimiento, a un ritmo de producción de un módulo solar cada 45 segundos.
El consejero delegado de la compañía, Juan Laso, explicó que el nuevo proyecto se desarrollará en la región italiana de Puglia y será el inicio del nuevo plan de expansión internacional.
Laso explicó además que en el presente ejercicio T-Solar tiene previsto iniciar la instalación de un total de 50 MW, que repartirá entre centrales construidas en suelo y cubiertas en sus mercados preferentes.
T-Solar es un grupo empresarial con marcado carácter tecnológico e industrial que ha convertido el aprovechamiento del sol para la generación de electricidad limpia en su principal razón de ser.
De capital cien por cien español, la compañía ha invertido más de 1.000 millones de euros en la puesta en marcha de un proyecto empresarial pionero que integra todas las actividades que conforman la cadena de valor del sector fotovoltaico.
En su nueva factoría, T-Solar produce los módulos fotovoltaicos más grandes del mercado (5,7 m2), utilizando tecnología de silicio amorfo hidrogenado de capa delgada. La completa automatización de la fábrica le permite alcanzar una capacidad de producción anual de 700.000 m2 de paneles, equivalente a una potencia de 45 MW/año.
Además, el Grupo T-Solar promueve, gestiona y explota sus propias centrales fotovoltaicas para comercializar la energía eléctrica que generan. Actualmente, cuenta con 28 parques fotovoltaicos en España, que suman una potencia instalada de 143,39 MWp y ocupan una extensión de 550 hectáreas, repartidas en 26 municipios de 16 provincias y 8 comunidades autónomas.
En sólo tres años, la compañía ha creado 220 puestos de trabajo directos y 1500 indirectos de alta cualificación y se ha situado en una posición de liderazgo en el sector fotovoltaico español. T-Solar tiene previsto acometer, en 2009 y en los años siguientes, su expansión internacional en países de la cuenca mediterránea y en EE.UU al tiempo que reforzará su presencia en España tanto en suelo como en tejados y marquesinas. Con este horizonte, T-Solar reforzará su contribución al desarrollo sostenible del planeta, impulsando una explotación racional e inteligente de un recurso limpio e inagotable como el sol.
El Grupo T-Solar inauguró a finales de 2008 en el Parque Tecnológico de Galicia, en el municipio de San Cibrao das Viñas (Orense), su primera fábrica de módulos solares fotovoltaicos con tecnología de lámina delgada de silicio amorfo de última generación, que reduce los costes de producción en más de un 25%.
De capital cien por cien español, el Grupo T-Solar invirtió más de 80 millones de euros en la puesta en marcha de esta nueva factoría. La facturación prevista para 2009 supera los 100 millones de euros en la actividad de venta de módulos, con un crecimiento sostenido de la cifra de negocio en ejercicios sucesivos.
Esta fábrica incorpora tecnología punta desarrollada por la multinacional norteamericana Applied Materials, compañía dedicada a soluciones tecnológicas en nanofabricación, para la producción de módulos solares con capas delgadas de silicio amorfo.
Partiendo de esta tecnología base, el departamento de I+D+i del Grupo T-Solar está implantando diversas mejoras que incrementarán todavía más el rendimiento y la competitividad de los nuevos paneles.
La factoría produce los módulos solares más grandes del mercado (5,7 m2), que aportan como principal ventaja competitiva una rebaja del coste por vatio de más de un 25%, así como una notable reducción de los costes de instalación y cableado.
T-Solar también ha conseguido reducir la cantidad de materia prima necesaria para la fabricación de los módulos (0,2 gramos de silicio por vatio, frente a los 10 gramos tradicionales) y ha mejorado su capacidad de integración en la edificación, por sus tamaños ajustados a los estándares arquitectónicos y su aspecto uniforme y estéticamente atractivo.
La completa automatización del proceso productivo posibilita la fabricación de 700.000 m2 de paneles fotovoltaicos de distintos tamaños, con una potencia nominal equivalente de más de 40 MW anuales, que se incrementarán a 65 MW/año en una segunda fase.
Esta superficie de módulos, una vez instalados, proporcionan energía eléctrica suficiente para abastecer cada año a más de 17.000 hogares medios y evitan, al mismo tiempo, la emisión de 50.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2).
La puesta en marcha del proyecto empresarial del Grupo T-Solar ha significado hasta la fecha una inversión superior a los 1.000 millones de euros. De ellos, 920 millones corresponden a la promoción y explotación de las 28 centrales fotovoltaicas que la compañía gestiona en España y los 80 millones restantes, a la construcción y puesta en funcionamiento de la planta de producción de paneles fotovoltaicos en San Cibrao das Viñas (Ourense).
En un sector joven y emergente como el solar fotovoltaico, la clave de la competitividad de cualquier proyecto empresarial radica en la investigación, el desarrollo y la innovación. Por ello, desde el inicio de su actividad, T-Solar se ha rodeado de socios tecnológicos líderes en sus respectivos ámbitos y ha creado en la fábrica de San Cibrao das Viñas (Ourense) un Laboratorio de I+D+i, que abarca cuatro líneas de trabajo:
1. Incremento del rendimiento: el proceso de fabricación de los módulos de silicio de capa delgada de grandes dimensiones empleado por T-Solar en su factoría de Orense parte de una tecnología altamente competitiva y novedosa. Las prioridades del Departamento de I+D+i en este ámbito están orientadas a la mejora del confinamiento óptico (óxido conductor transparente y contacto reflector posterior) y a la implementación de células de unión doble aSi/ucSi con reflector intercalado con el fin de mejorar el rendimiento de los módulos
2. Control de producción y metrología: a través de esta unidad de investigación, T-Solar desarrolla nuevas técnicas para controlar la producción de los módulos de silicio en capa delgada , entre ellos sistemas de metrología, en línea y fuera de línea, para constatar que los módulos producidos cumplen estrictamente las especificaciones del diseño.
3. Desarrollo de parques fotovoltaicos en suelo: las prioridades de investigación de T-Solar acerca de los sistemas fotovoltaicos en suelo se centran en minimizar su coste, en facilitar la operatividad de instalación de los módulos y las conexiones, en favorecer el respeto al medio ambiente y en diseñar un sistema que reduzca la utilización de materiales.
4. Integración en edificios: el desafío de la integración de elementos fotovoltaicos en los edificios ha llevado a T-Solar a abrir una línea de investigación específica para, entre otros objetivos, responder a las demandas de adaptabilidad y estandarización de los módulos a las medidas arquitectónicas, combinar elementos opacos y transparentes, minimizar los costes de producción, facilitar la instalación de los módulos y desarrollar elementos específicos para fachadas, cubiertas y sistemas de sombreado.
La generación de energía eléctrica a partir de la radiación solar se desarrolla sin necesidad de elementos móviles, ciclos termodinámicos o reacciones químicas. Se trata de un proceso de transformación de energía en el que la captación de la luz solar se realiza a través de módulos fotovoltaicos. Estos paneles están formados, a su vez, por elementos semiconductores unidos en serie y denominados células fotovoltaicas, que son las encargadas de transformar la energía lumínica (fotones) en energía eléctrica (electrones).
Las células fotovoltaicas se componen, fundamentalmente, de dos capas de silicio (tipo P y tipo N) separadas entre sí por una sustancia semiconductora. Cuando la luz solar incide sobre la primera lámina se liberan electrones de silicio que son lanzados a través del filtro semiconductor en una única dirección sin posibilidad de retorno. Entonces, las capas adquieren polarizaciones diferentes, lo que provoca que los electrones vuelvan a la primera de ellas mediante un conductor eléctrico externo.
De esta manera, se cierra el círculo de corriente que permite la perpetuidad del proceso. En un último paso, como la energía eléctrica generada es en corriente continua y, por tanto, no apta para su utilización, los denominados inversores se encargan de convertirla en corriente alterna para poder inyectarla en la red de abastecimiento.
Debido a su situación geográfica y a sus particulares condiciones climatológicas, España es el país europeo con mayor radiación solar: sobre cada metro cuadrado de superficie inciden al año unos 1.500 kilowatios/hora energía. Sin embargo, el desarrollo de la energía solar fotovoltaica ha estado siempre muy limitado por la falta de concienciación ecológica y la necesidad de una inversión inicial elevada.
En los últimos años, el abaratamiento de los costes y la concesión de primas a la producción por parte de la Administración estatal han mudado esa tendencia, al propiciar la aparición en el mercado fotovoltaico de nuevos grupos empresariales que han incrementado considerablemente tanto la inversión industrial como la generación de energía solar fotovoltaica.
En la actualidad, España es el primer país productor de energía solar fotovoltaica a nivel mundial, tras haber adelantado a Alemania y haber acumulado una potencia instalada de más de 2.600 MW.
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T-Solar
T-Solar is a well defined technological and industrial group, whose main business purpose is to use the sun as a clean energy source.
This 100% Spanish company has invested more than 1,000 million Euros in a pioneering business project which integrates all activities that comprise the value chain of the photovoltaic sector.
Its new factory produces the biggest photovoltaic panels in the market (5.7 m2), using thin film hydrogenated amorphous silicon technology. Full automation of the factory enables it to reach a production capacity of 700,000 m2 of modules per year, equivalent to a power rating of 45 MW/year.
The T-Solar Group furthermore promotes, manages and operates its own photovoltaic plants in order to market the electricity they generate. It currently has 28 photovoltaic parks in Spain that produce an installed power output of 143.39 MWp and occupy an area of 550 hectares, distributed over 26 municipalities of 16 provinces and 8 autonomous regions.
Two hundred and twenty direct jobs and 1,500 indirect highly qualified ones have been created in just three years, thereby achieving a leading position in the Spanish photovoltaic sector. In 2009 and onwards, the company plans to carry out its international expansion in the Mediterranean countries and the USA. It will simultaneously reinforce its presence in Spain, both in ground modalities as well as in roof and shelter modalities. In this manner, T-Solar will strengthen its contribution to sustainable development of the planet, by promoting a rational and intelligent exploitation of a clean and never ending resource, namely, the Sun.
Investment: The starting up of the T-Solar Group business project has meant an investment of more than 1,000 million Euros to date. Of these, 920 million correspond to promotion and operation of the 28 photovoltaic plants that the company operates in Spain, and the remaining 80 million have been destined for construction and starting up of the photovoltaic panel factory in San Cibrao das Viñas (Ourense).
Business turnover: The T-Solar Group plans to surpass its overall turnover of 170 million Euros during 2009. It furthermore foresees a steady growth of such business turnover in the following years as a result of improvements in productivity and efficiency of its photovoltaic modules.
Employment: Staff numbers are currently around a hundred workers and plans are that they reach 220 workers in the third quarter of 2009. Of these, 190 will work at San Cibrao das Viñas factory (Ourense), while the rest will be spread over its offices in Madrid and Vigo, and in the 28 photovoltaic parks located all over Spain.
In a young and emerging sector, as is the case with the solar photovoltaic one, research, development and innovation are key factors to competitiveness in any business project. To that end, right from the beginning of its activity, T-Solar has sought the support of technological partners that are leaders in their respective fields and created a R&D&I laboratory at San Cibrao das Viñas (Ourense) along the following four lines of work:
1. Higher Performance
The manufacturing process of the large thin film silicon modules used by T-Solar in its Orense factory, is initiated using highly competitive and innovative technology. The priorities of the R&D&I Department in this field are oriented towards improving optical confinement (transparent conductive oxide and back reflector contact) and also towards the implementation of double connection cells aSi/ucSi with interspersed reflector, in order to improve performance of the modules.
2. Control of production and metrology
This research unit develops new techniques to control production of the thin film silicon modules, as well as metrology systems, both in line and out of line, in order to ensure that the modules produced strictly comply with design specifications.
3. Development of ground based photovoltaic parks:
The research priorities of the ground based photovoltaic systems are to reduce costs, facilitate installation, connection and operation of the modules, be environment friendly and design a system that reduces use of raw materials.
4. Integration in Buildings:
The challenge of integrating photovoltaic elements in buildings has led the company to open a specific line of research to, among other objectives, respond to the need for adaptation and standardization of the modules to architectural dimensions, combine opaque and transparent elements, minimize production costs, facilitate module installation and develop specific elements for facades, roofs and shade systems.
Electricity can be generated from solar radiation without any need for mobile elements, thermodynamic cycles or chemical reactions. It is an energy transformation process where sunlight is captured using photovoltaic modules. These panels are in turn made up of semiconductor elements that are joined in series called photovoltaic cells, and are the ones responsible for converting light energy (photons) into electricity (electrons).
Photovoltaic cells are basically comprised of two silicon films (P- type and N-type) that are separated by a semiconductor substance. When sunlight comes into contact with the first film, silicon electrons are released, which then pass through a semiconductor filter in a one-way direction without any possibility of return. Films then acquire different polarizations, and therefore electrons can return to the first film by passing through an external electric conductor.
In this manner, the current circuit is closed and enables the process to continue forever. Since the electricity generated is a DC supply, which is unsuitable for use in homes, devices called inverters convert the DC supply into AC supply in a final step so that such energy can then be injected into the electric power supply grid.
Spain is the European country with higher solar radiation thanks to its geographic location and its peculiar climatic conditions and therefore every square meter of area receives around 1,500 kilowatts/hour of energy per year. However, development of solar photovoltaic energy has always been very limited due to the lack of ecological awareness and the need for high initial investment.
In the past years, the reduction of costs and production bonus incentives given by the Central Government have changed this trend, and we now have new business groups in the photovoltaic market that have considerably increased the overall industrial investment as well as generation of solar photovoltaic energy.
At the present time, Spain is the first producing country of photovoltaic solar power worldwide, after having advanced Germany and having accumulated an installed power of more than 2.600 MW.